Vas a tu médico porque presentas una lesión en los muslos que te causa escozor, te evalúa, te pide un "raspado para hongos", confirma el diagnóstico y te receta un trifármaco ( crema que contiene antimicótico, corticoide y antibiótico). Sigues las indicaciones; en vez de mejorar, la lesión se extiende y te aparecen estrías en la zona tratada. Luego de investigar, por recomendación de un familiar médico, consultas a otro especialista quien confirma el diagnóstico de hongo y te explica en palabras sencillas que las estrías son consecuencia del corticoide contenido en la crema, podrían mejorar parcialmente con láser. Tras despejar tus dudas te receta unas pastillas antimicóticas. En tu consulta de control la micosis ha mejorado y decides iniciar el tratamiento de las estrías con láser. Estamos ante una: CONSULTA MÉDICA DE SEGUNDA OPINIÓN, tópico sobre el que responderemos las siguientes interrogantes:
¿QUÉ ES LA CONSULTA DE SEGUNDA OPINIÓN MÉDICA?
Es la revaluación de un problema de salud hecha por un facultativo distinto al médico tratante. Se realiza a solicitud del propio paciente o de la persona tutelar del mismo.
¿EN QUÉ CONSISTE?
En esta nueva consulta se realiza: el interrogatorio referido al problema de salud, el examen físico, el planteamiento de un diagnóstico o posibilidades diagnósticas, la solicitud de exámenes de ayuda diagnóstica (esto es solo cuando es pertinente ) y la proposición de un plan terapéutico que será evaluado en el seguimiento de la evolución.
¿QUÉ LLEVA A UN PACIENTE A CONSULTAR CON OTRO MÉDICO SOBRE UN MISMO PROBLEMA DE SALUD?
Los motivos son variados: duda del diagnóstico, carencia o deficiencia de una adecuada explicación (esto incluye: diagnóstico, resultados de análisis, tratamiento o pronóstico), falta de respuesta a la terapia (en ocasiones costosa y prolongada), conocer otras opciones de tratamiento y temor a una cirugía, entre otros motivos.
¿CÓMO REALIZAR UNA CONSULTA DE SEGUNDA OPINIÓN MÉDICA DE CALIDAD?
Diagnóstico: puede ser confirmado o corregido. Es muy importante escuchar y examinar al paciente con especial atención. La experticia (suma del conocimiento teórico y experiencia) del especialista hace la diferencia. Donde el ojo poco entrenado vio una alergia recalcalcitrante; el instruido y adiestrado podrá discernir un paciente con linfoma cutáneo, por citar un ejemplo. Otro factor decisivo es saber explicar en un lenguaje sencillo, sin los abrojos de una jerga médica pomposa ( no todo es estrés) y asegurarnos de que hemos sido entendidos.
Exámenes de laboratorio: se solicitarán cuando halla duda; no se debe abusar de ellos. Sus resultados deberán ser interpretados y adecuadamente explicados.
Tratamiento: irá de la mano con el diagnóstico y deberá tener un sólido sustento científico. No debemos de sobredimensionar del uso de ampollas cuando el paciente no las necesite u hospitalizar cuando podemos tratar ambulatoriamente. Si se confirma un cáncer deberá explicarse todas las opciones de tratamientos disponibles. Los procedimientos quirúrgicos requieren del consentimiento informado del paciente. La consulta de segunda opinión médica puede reducir las cirugías hasta en un treinta por ciento de los casos.
Cuando la solución del problema de salud no esté en nuestras manos no dudaremos en derivar al especialista o sub especialista indicado. De modo similar, si diagnosticamos una enfermedad que tiene cobertura gratuita por el Estado ( Tuberculosis, SIDA, lepra, uta,etc) o el paciente cuenta con seguro médico, actuaremos con la ética que aprendimos de nuestros maestros y derivaremos al paciente con su respectivo resumen de historia clínica.
Como hemos visto la consulta de segunda opinión médica es una valiosa herramienta que permitirá al paciente despejar todas sus dudas y decidir de manera informada la mejor opción terapéutica.
En Dermaláser contamos con una sólida experticia y el respaldo de 20 años de experiencia lo que nos permite brindarles una atención médica de calidad, te esperamos.