PSORIASIS
Dr. CHERNAN ZAPATA GRANJA
DEFINICIÓN:
Es una enfermedad en la cual existe una producción acelera de queratinocitos (células principales de la piel) y descamación rápida, asociadas a inflamación. Se caracteriza por lesiones escamosas blanquecinas que al ser rascadas sangran. Suele localizarse en codos, rodillas, piel cabelluda y uñas; aunque cualquier zona del cuerpo puede ser afectada. En ocasionnes puede afectar a las articulaciones en forma de artritis psoriásica. En la actualidad se conoce que en la psoriasis se produce una inflamación sistémica que va más allá de la piel
CAUSAS, DESENCADENANTES FACTORES PREDISPONENTES :
Se desconoce la causa exacta. Existe teorías que hablan de autoinmunidad: respuesta exagerada del propio organismo que ataca a la piel lo que produciría la enfermedad. Los factores desencadenantes son: traumatismos (golpes, rascado, quemaduras, cirugía, etc), drogas (algunos antihipertensivos, antimaláricos, litio) e infecciones de piel. En algunos pacientes existe una predispoción genética.
Debe quedar en claro que la psoriasis no es: infecciosa, contagiosa, mal de la sangre, cáncer ni es afectada por la dieta.
TRATAMIENTO:
El tratamiento es individualizado y es dado por el dermatólogo. La terapia local y tópica (cremas, lociones, champúes) se utiliza en los casos localizados y/o leves: corticoides alquitrán de hulla, ácido salicílico, urea, vaselina, antralina, derivados de la vitamina D, etc. En los casos graves o de poca respuesta se prefiere la terapia sistémica: metotrexato, acitretin y ciclosporina. Entre los nuevos tratamientos que venimos utilizando tenemos: terapia biológica (moléculas producidas por organismos vivos, que estimulan o inhiben nuestras defensas y bloquean la inflamación) y la fototerapia( fuentes de luz ultravioleta para atenuar la inflamación). Muchas veces la psoriasis es empeorada por la automedicación o mal tratamiento, ocurre especialmente cuando el paciente utiliza inadecuadamente los corticoides (locales o sistémicos): incremento de peso, estrías, colesterol elevado, presión alta, mayor riesgo de diabetes, propensión a fracturas, cataratas y, lo más temible, dependencia del medicamento con exacerbación y agravamiento de las lesiones al suspenderlo.
El objetivo del tratamiento es mantener al paciente con el menor número de lesiones posibles, mejorar su calidad de vida, esto se consigue con la educación y disciplina del paciente y el trato integral de su dermatólogo y especialistas afines ( endocrinólogos, reumatólogos, médicos internistas y cardiólogos).